My baby is four! He had a birthday last Thursday. His special treat was to be able to lick milk from the bottle (I left the last bit so he could feel important drinking straight from the bottle and slurping from the top) and a little extra cheddar for lunch. The cat is a dairy maniac. It's hard to believe it's been that long... I still remember his ET face when I first saw him, big ears, tiny mouth and a meow that seemed to be too big for such a small cat :) He still has the big ears -my mother thinks he looks like a jack rabbit-, the tiniest mouth ever on a grown up cat and a shrill that can make hairs stand on end.
We got to celebrate his birthday with a no sewing day. At least I can't recollect sewing on Thursday, other than a half hour of practicing free-motion machine quilting. Having just finished a table runner
to replace the old one, I figured I'd give free motion a try once again. Well, it is getting better, but not good or nearly good enough to ruin anything other than two pieces of flannel sewn together. I am going to have some fancy dusting cloths by the time I am done with the practicing! Yesterday, we (Tito and I) sat down at the machine to quilt it. Just straight lines every other log quilted with the even feed foot. I picked up a homespun type plaid for the backing. It was cheap and it was just what I had in mind, so it worked out great. At least Tito seemed to approve by planting his little bony behind on top of it while I was trying to turn it. If ever I get good enough to do free motion, I'll have to lock myself up, or at least make sure the cats are napping while I do it.
I realized how little thought I give to planning a quilt now. I had scraps, I had seen this table runner on Violeta's webshots, I wanted to make it since I saw it. All I did measure the table, figure out how big a block would give me a good enough size and jolt down the measurements of the strips on a paper pad, then cut away. That works out when doing a scrappy project, however I often find myself running out of fabric when it comes to any other kind of quilt. I've been trying to work out the evil details of my next "planned" quilt before I order (my buying small amounts backfires when a quilt requires more than half a yard of any particular color). After drawing a rough sketch on EQ and seeing the estimates, my heart did a flip. That much red??? Impossible! So one and a half yards will do. Then the evil little voice in my brain kicked in "what if you run out?". That has been keeping me from ordering yet. Fabric has such a short shelf life now, running out can be a disaster. I hope by the next time I sit down to type, I will have my fabric, panic or not.
Phoebe seems to approve the new runner, so chances are, she'll like the new one as well. Shame she won't be allowed on it for a while, at least ;)
Mi pequeño tiene cuatro años! Fue su cumple el jueves. Para celebrarlo, le dejé que se bebiera un poco de leche que me quedaba de la botella y que rechupetejeara el tapón. También comió un poco de queso en el almuerzo. El gato es un junkie de la sección de lacteos. Todavía recuerdo cuando lo encontré, con las orejas gigantescas y la boca tan canija, parecía un ET, pero ya maullaba que te ponía los pelos como escarpias. Mi madre dice que parece un conejo. Todavía tiene las orejas gigantescas, la boca canija y sus maullidos levantan muertos de las tumbas.
Celebramos también no cosiendo mucho. Por lo menos no recuerdo haberme pasado el día cosiendo. Lo único que hice fue practicar el acolchado libre una media hora. Habia terminado un camino de mesa el miercoles y pensé que podría intentar acolcharlo con acolchado libre. Bueno... pues de momento no. Aunque creo yo que he mejorado algo, no está aún ni medianamente bien para cargarme algo que no sean dos trozos de franela con un poco de batting enmedio. Voy a tener los trapos del polvo más elegantes del mundo! Asi que ayer Tito y yo nos sentamos a acolchar lineas con el pie de arrastre, una linea cada dos troncos. Había comprado una tela de cuadros muy barata para la trasera y funcionó de maravilla. Por lo menos a Tito le gustó. Se sento con su culillo huesudo y no podía darle la vuelta al quilt. El día que me ponga en serio con el acolchado libre voy a tener que encerrarme sin gatos. O por lo menos aprovechar cuando se duerman la siesta.
Me dí cuenta en lo poco que pienso en planear un proyecto hoy en dia. Con éste, lo había visto en el webshots de Violeta, me encantó, tenía retazos. Me senté con un lapiz y papel a ver el tamaño de los bloques para que me cubriese la mesa. Garabateé las medidas de las tiras y me puse a ello. Funciona siempre y cuando el quilt sea de retazos, pero cuando es de colores planeados... uff! Siempre acabo sin tela cuando empiezo algo que tiene que casar. Llevo ya unas semanas pensando en el siguiente quilt antes de ponerme a hacer el pedido de telas (tengo que pedir porque generalmente no tengo mucho más de media yarda de ninguna en particular). Después de dibujar un boceto en EQ y ver las cantidades, se me paró el corazón. Tanto rojo??? Imposible! Una yarda y media va a ser suficiente. Y la vocecilla en mi cabeza dice "y si se te acaba?". Ese pensamiento me ha paralizado varios dias y no he hecho aún el pedido. Las telas no duran mucho en las tiendas hoy en día. Espero que para la próxima vez que me siente a escribir ya tenga la tela en casa, con o sín pánico.
A Phoebe parece que le gusta el nuevo camino de mesa, así que seguro que también le gustará el próximo quilt, aunque no podrá sentarse encima de ese por lo menos hasta finales de septiembre ;)